Lagunas de Neila

Lagunas de Neila

Sierra de la Demanda

Burgos

Distancia: 10 Km.

Tiempo estimado:  4 Horas

Desnivel acumulado:  450 m.

Para esta ruta nos tendremos que acercar hasta el pueblo burgalés de Quintanar de la Sierra, la mejor opción es por la A62 hasta Quinta del Puente y aquí cogemos dirección a Lerma y desde aquí por Covarrubias a Hortigüela, a Salas de los Infantes y Quintanar.

Desde Quintanar de la Sierra sale una carretera que nos sube hasta las Lagunas de Neila, hay varios aparcamientos, subiremos hasta el último, el parquin de Peña Aguda. Estaremos a 1860 m.

Los circos glaciares con mayor desarrollo se localizan en el sector nororiental de la Sierra de Neila. El más espectacular es el que está ocupado por las oscuras aguas de dos grandes lagunas: la Laguna Negra y la Laguna Larga. El circo de la Laguna Negra es el más grande y de formación más perfecta del Sistema Ibérico. Justo debajo del circo en el que se encuentran estas dos grandes lagunas, se suceden las demás formaciones glaciares. Las primeras son la laguna de Las Pardillas y el nicho del Contadero.

La ruta la haremos en la dirección menos lógica, comenzaremos bajando a la laguna de la cascada, que se encuentra a 1685 m, desde esta nos dirigimos a la parte alta, dejando a un lado la ruta que nos llevaría a la laguna de la Tejera y remontando la ladera hasta el Contadero a 1920 m. magnífico mirador desde donde ya vemos las lagunas.

Desde el Contadero ya se divisa el alto del pico de La Laguna 2004 m.  otro buen mirador, luego seguiremos por el cordal rodeando todo el circo glaciar hasta el alto de La Campiña a 2049 m. que será el punto más elevado de nuestra ruta.

Desde el alto podremos divisar a lo lejos la Muela de Urbión y todo el paisaje típico de esta sierra burgalesa. Desde aquí comenzará el descenso, que le haremos por el bosque en busca de la laguna Brava y la laguna de los Patos.

El Parque Natural de las Lagunas Glaciares de Neila está acompañado de un frondoso y extenso Hayedo-Pinar. Las dos especies principales, el haya y el pino albar, conviven con otros ejemplares (cerezo silvestre, roble, acebo, etc.), conformando un bosque de montaña excepcional que da cobijo a gran variedad de animales. El lobo, el venado y el corzo son especies emblemáticas.