La Maladeta, Pico Abadías y Aneto
Nos pasamos el viaje discutiendo sobre la posibilidad de hacer La Maladeta y el Aneto en el mismo día.
Esto implicaba hacer también el Pico Abadías como transición entre los dos glaciares para no perder demasiada altura.
El paso habíamos leido que no era fácil, pero como íbamos sólos y llebábamos material decidimos intentarlo y si no se podía nos dábamos la vuelta.
Teníamos el martes para hacer el Aneto, y si salía bien nos quitábamos gente en el paso de Mahoma.
Comenzamos nuestra aventura en el valle de La Besurta, que remontamos en autobus desde los Llanos del Hospital.
Despues de 40 minutos andando alcanzamos el refugio de La Renclusa, donde por ser domingo, había una buena romería.
Aquí hay un cartel que reza "todo el que llega aquí tiene derecho a una buena cena" de lo que damos fe.
Luego a dormir pronto, pues la hora que escogimos para desayunar eran las 5 de la mañana.
A las seis comenzamos nuestro camino a la luz de los frontales.
Empezaba a amanecer en los primeros neveros que nos encontramos.
En los valles la niebla lo tapaba todo.
Así que a remontar este pedregal que nos separa de la cresta de Los Portillones.
Poco antes del Portillón Superior, pasamos al otro lado de la cresta para encontrarnos con el glaciar de La Maladeta, que ya con los crampones comenzamos a remontar a la sombra, pero deseando llegar al sol. Estábamos a 3000 m. y había helado.
Nuestra mirda siempre en la canal de La Rimaya, habíamos leido tantas cosas…
Pero no fue para tanto, la temible rimaya se estaba empezando a formar, quedaba demasiada nieve y aun se podía acceder a la pared para remontarla. De todas formas las proporciones de la grieta se las traen…
La canal solo tenía nieve al principio, el resto piedra muy descompuesta, pero fácil de subir por que no faltan agarres.
Cuando llegamos al collado de La Rimaya pillamos al Ibón de Cregüeña quitandose el traje de invierno.
Desde el collado sin dificultad alcanzamos la cumbre de La Maladeta.
El socabón de la rimaya desde la cumbre.
El glaciar de La Maladeta con la cresta de Los Portillones de fondo.
Hacia el Oete tenemos el Collado de la Rimaya y la cresta de las Maladetas, al fondo se distinguen El Perdiguero y El Poset.
Y al Este el glaciar del Aneto con su propietario al fondo, envuelto entre algodones.
Por el Sur ademas del Ibon de Cregüeña, tenemos este panorama de crestas que tendremos que bajar y volver a subir para llegar al pico Abadías. Fue el tramo más entretenido y complicado. En un destrepe con bastante patio montamos un rapel, el terreno esta muy descompuesto. Mientras lo montábamos llegó una pareja de aragoneses que les vino que ni pintado.
Ya con ellos coronamos el pico Abadías.
Y por la otra arista y con la atenta mirada del Pico Maldito, bajamos los cuatro al glaciar del Aneto.
Nosotros nos paramoa aquí a reponer fuerzas y luego como si fuéramos hormigas, nos pusimos a cruzar el glaciar.
Cruzando bajo el Pico Maldito, al fondo La Maladeta y el Pico Abadías.
Recorrimos el glaciar por la parte alta, para disfrutar de las formaciones del borde.
Tiene algo mas de inclinación, pero la nieve estaba dura.
Las grietas nos sirvieron para hacer la travesía mas entretenida. Por el medio solo se ve la huella por la que camina todo el mundo.
Tambien nos permitió hacer buenas fotos. Esta, entre el Pico del Medio y la Punta Astorg
Frente al Pico Coronas, nos encontramos esta inmensa duna.
Tiene una profundidad de casi 10 m. y en el trak se nota la curva para rodearla.
Llegando a la altura del Collado Coronas nos queda un repecho de campeonato. Pero ya huele a cumbre…
Aquí llegamos a la antecima y nos deshicimos de mochilas y demás hierros para ir ligeros por si había que volar…
Nos asomamos con cuidado y vimos esto… en principio sin problemas.
Incluso había tiempo y ganas de brindar al sol
En dos pasos se divisa la cruz de los sueños de tantos montañeros.
La emoción de hacer cumbre en el Aneto es un momento privado, intimo…
Lo vi en mil fotos, pero es algo mítico. Llegar aquí tiene magia…
Por si fuera poco hemos conseguido otro deseo, hacer cumbre en solitario. El Aneto para nosotros…
A nuestras espaldas, por el Oeste, la ruta por la que venimos.
Al Sur el Ibón del Coronas, también con la ropa de entretiempo…
Y junto a la cruz, la foto de la satisfación, del recuerdo de otro sueño conseguido…
Pero no hay que soñar demasiado… aún queda bajar…
El paso de Mahoma se sube y se baja bien, sin mayores dificultades.
Pero bajando te permite hacer fotos con las que convencer a alguien para que no lo intente…
Lo cierto es que pasa cualquiera, vimos solo bajar a dos, pero…
Desde la antecima una mirada sobre el glaciar para buscar el paso del Portillón Superior
Y nos ponemos en marcha, otra vez como hormigas ante estos colosos…
Despues de atravesar todo el glaciar, llegamos al Portillón Superior, único paso para cruzar la cresta de Los Portillones
Esta es la bajada del Portillón por el otro lado, la subida en la ruta normal al Aneto. Nosotros por la mañana antes de este punto nos desviamos a la derecha para remontar la cresta por la otra vertiente.
Desde aqui solo nos queda bajar hasta el refugio.
800 m. de desnivel nos separan de la ducha y la cena.
El martes como teníamos los deberes hechos y bastante cansancio acumulado nos fuimos a Ordesa a disfrutar del agua de este verano atípico en unas cascadas preciosas, la idéa era andar un poco para relajar musculatura, pero una vez allí nos la dimos buena, bajamos a las 9,30, en el último autobus…
El Miércoles ya de camino parada en Jaca a comer en casa de mi hermana un marmitako de muerte. La granuja cocina también como mi madre…
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